Beneficios terapéuticos de un huerto

 

 

 

La actividad de cultivar un huerto o jardín trae beneficios terapéuticos que mejoran la calidad de vida, independiente de la edad de quien cultive. Se ha visto en distintas experiencias en el mundo que el cultivar mejora la salud mental, emocional y física de la personas. Entre estos beneficios están:

  • Tener contacto con las plantas nos estimularán los lazos con la naturaleza, además de conectarnos con el medio ambiente.
  • Recrea el espíritu, además de estimular la atención y la memoria
  • Trabajaremos la paciencia y será una actividad reconfortante al cosechar luego de un tiempo los frutos de nuestro trabajo.
  • Nuestras plantas serán una compañía, un refugio, un pasatiempo y un trabajo.
  • El contacto con la tierra mojada y los olores de nuestros vegetales nos dará un placer inexplicable que nos ayudarán a contactarnos con nosotros mismos, nos estimulará los sentidos y mejorará nuestras funciones motoras.
  • Promueve la movilidad, pues desarrolla habilidades como la precisión, lo coordinación, el equilibrio y la condición física.
  • Es una Actividad lúdica que permite la interacción social, la comunicación y las relaciones sociales. 
  • Cultivar un huerto, ayuda a combatir los pensamientos que subyacen a la depresión y que llevan a conductas de aislamiento.
  • Ayuda a combatir la depresión que puedan padecer por un sentimiento de abandono o soledad
  • Tener una responsabilidad hace que aumente la autoestima y disminuye la posibilidad de padecer ciertas enfermedades.

 

La huerta como terapia trae consigo una serie de beneficios para los estados de estrés o ansiedad. El solo hecho de poder caminar o trabajar al aire libre, entre plantas, mariposas, pájaros y árboles frutales proporciona bienestar psíquico, ya que esto representa un ambiente relajante y permite la disminución de estados de tensión

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